Todos sabemos que nuestro perro es uno más de la familia, partiendo de esa base y por el afán de cuidarlo bien, a veces acabas cometiendo errores que podrían afectar negativamente a tu animal. Si no quieres equivocarte con el adiestramiento de tu perro te recomendamos que leas los 8 errores más comunes que cometemos.
Equivocaciones que cometemos y no nos damos cuenta
Tener una mascota es una gran responsabilidad, por eso mismo cuidarlos y evitar cometer ciertos errores es la clave para tener unas mascotas felices y bien educadas.
Darle demasiada atención a tu perro en determinadas situaciones
Aunque no lo parezca, un exceso de atención hacia tu perro puede ser perjudicial para la mascota y es un error bastante común. El animal debe aprender a tener su espacio y su tiempo a solas, sin depender de ti. Si estás a expensas de todo lo que pidan, puedes generar malas conductas.
Algunas consecuencias del trato excesivo es que podría volverse un perro demasiado dependiente y asustadizo. También puedes crearle grandes inseguridades y ansiedad.
Darle de comer al perro lo que hay en nuestro plato
Otro error bastante común que cometes al cuidar de tu mascota es darle comida que no sea su pienso. Es cierto que los perros tienen un estómago bastante fuerte para digerir los alimentos, pero hay ciertas comidas que nosotros tomamos con normalidad y que no son buenas para ellos. Por lo tanto, debes tener cuidado con ciertos alimentos que pueden ser nocivos para la salud de tu perro. Así que recuerda: el pienso cuenta con todo lo que necesita tu mascota para mantener una dieta equilibrada.
Que el perro tire de la correa en los paseos
Es bastante común que el perro tire de la correa del dueño durante los paseos y es una conducta que se debe corregir. Si no, el paseo se puede convertir en un ejercicio de paciencia y esfuerzo poco gratificante. El perro necesita disciplina y este tipo de cuestiones se enseñan cuando es un cachorro. El caso es que se deben corregir ese tipo de comportamiento para que no reporten problemas más graves de comportamiento a la larga.
No cuidar su higiene dental
Nosotros nos lavamos los dientes todos los días y cuidamos nuestra dentadura hasta que nos hacemos ancianos, pues en el caso de los perros es igual. Debemos limpiarles los dientes con asiduidad, estar muy pendientes del sarro y otras complicaciones que pudieran surgir. Siempre puedes seguir una serie de consejos para mantener limpio a tu perro.
Fumar cerca de los perros
Es cierto que cada vez se fuma menos, pero para los dueños que todavía lo hacen se les debe advertir que, al igual que los humanos, las mascotas también pueden convertirse en fumadoras pasivas. Además, el monóxido de carbono y la nicotina del humo del tabaco tienen cerca de 4,7 sustancias nocivas.
Por otra parte, el aire de la casa también puede viciarse y contener hasta 50 veces más sustancias cancerígenas que el humo del tabaco. Así que, mucho cuidado y evita fumar cerca de tus mascotas.
No saber cuánto ejercicio necesita hacer
Cada perro es un mundo, dependiendo del carácter del animal, la edad, la raza y otros factores, necesitarán más o menos ejercicio. Es cierto que no le pueden faltar sus paseos, lo ideal son entre 3 ó 4 de unos 15 a 30 minutos. Debe hacer sus necesidades con tranquilidad y olfatear todo lo que necesite. Si no sabes cuánto ejercicio necesita tu perro lo ideal es observarlo, salir con él y realizar varias sesiones de ejercicio, encontrar sus preferencias e ir adecuándolo con el tiempo.
Que empiece a socializar muy tarde
La socialización es una etapa muy importante de nuestro perro. Suele empezar a las 3 semanas de vida y finaliza alrededor de los tres meses, en los que conoce a las especies amigas. Gracias a esta etapa el perro empieza a desarrollarse y a aprender del comportamiento de sus congéneres. Debemos incentivar a nuestro perro que juegue e interactúe, así conseguirá experiencias positivas que le ayudarán en su desarrollo hasta llegar a la etapa adulta.
Olvidar que es un perro
Queremos mucho a nuestras mascotas, pero no debemos olvidar que, a pesar de ello, son animales irracionales. No podemos tratarlos como si fueran personas. A veces una excesiva atención y cuidados puede provocar comportamientos inadecuados en nuestro animal. En ocasiones, al tratarlos como personas, podemos malinterpretar sus comportamientos y no comprender sus verdaderos motivos. Tenemos que cuidarlos, darles mimos y alimentarlos, pero sin olvidar que son animales y se comportan como tal.