En febrero de 2022 se aprobó la Ley de Bienestar y Protección Animal en España, que pretende responder a las demandas de los ciudadanos con respecto al abandono animal, el maltrato y sacrificio de animales. Pero, ¿en qué consiste exactamente esta nueva ley de Protección Animal?
El primer paso se dio el 5 de enero de 2022, cuando entró en vigor la modificación del régimen jurídico que supone el preámbulo a la nueva Ley de Protección Animal. Este cambio reconoce a los perros y gatos como “seres vivos dotados de sensibilidad”. ¿Y qué implica? Que habrá que tener en cuenta su bienestar incluso en casos de separación o divorcio de los propietarios, que no podrán ser incluidos en las deudas hipotecarias como pertenencias y, además, se aspira a controlar mejor las poblaciones de animales.
¿Cómo es la nueva Ley de animales?
La nueva Ley de Protección Animal en teoría prohibirá varias prácticas que hasta ahora venían siendo habituales. Estas son algunas de ellas:
- Sacrificio cero de animales de compañía: cuando entre en vigor la nueva normativa estará completamente prohibido sacrificar animales, salvo que sea por motivos de salud pública o de eutanasia.
- Prohibido el abandono y la liberación de cualquier tipo de mascota o su introducción en un medio natural.
- No podrán venderse animales en las tiendas de mascotas. Tampoco se podrán exhibir o exponer al público con fines comerciales ni usarse como premio, promoción o reclamo para mendigar.
- La cría deberá ser llevada a cabo por criadores autorizados, nunca particulares, y estos deberán figurar en varios registros diferentes.
- Se prohíben prácticas que provoquen sufrimiento a los animales, como el uso de collares de pinchos, eléctricos o el atarlos a un vehículo en marcha.
- Los particulares no podrán tener más de 5 animales en casa.
- Se eliminará la distinción PPP (perros potencialmente peligrosos). Se considera que ningún animal es peligroso por su raza en sí, sino que deben ser evaluados de forma individual. Pasarán a considerarse “de manejo especial” y el nivel de amenaza no será determinado por la raza, sino por el comportamiento del individuo en cuestión.
- La esterilización será obligatoria.
- Los animales salvajes quedarán vetados de los circos. Además, tampoco se podrán usar animales en espectáculos públicos o actividades artísticas o publicitarias si causan angustia, dolor o sufrimiento al animal.
- Quedan prohibidas las mutilaciones o modificaciones corporales, como cortar rabos y orejas a los perros o amputar las uñas a los gatos. Solo podrán hacerse por motivos médicos o para garantizar la salud del animal.
- Quedan totalmente prohibidas las peleas de animales y el adiestramiento de estos para dichos fines.
- Queda prohibido mantener a los animales encerrados de forma permanente en terrazas, balcones, azoteas, trasteros, etc. y también en vehículos.
- Los veterinarios solo podrán poner el microchip a animales que vengan de entidades de protección oficial o de criadores registrados. Los restantes tendrán que pasar un proceso de regularización para poder ser registrados.
- Se prohibirá la cría de animales alóctonos, es decir, no procedentes de España, para evitar los daños medioambientales creados por las especies invasoras.
- Se creará un Listado Positivo para establecer los animales que sí se pueden tener como mascotas, quedando prohibidos todos los demás.
- Los perros maltratados o abandonados no tendrán que ser devueltos a sus propietarios.
- Un perro no podrá estar más de 24 horas sin supervisión, salvo en el caso de perros pastores. Recurrir a una guardería de perros en Madrid puede ser una solución si necesitas salir de viaje o has tenido una emergencia.
- No existirán distinciones en cuanto a los derechos de los animales: no importa si tienen o no dueño, si viven en la calle o si tienen un hogar y tampoco si son o no perros de trabajo.
Otra cuestión interesante es el establecimiento de un reglamento sancionador que contempla tres tipos de multas: leves, graves y muy graves, que pueden llegar a penalizarse con hasta 600.000 euros. Las sanciones también incluyen que pueda llegar a decomisarse al animal y la posibilidad de inhabilitar al propietario para la tenencia de animales hasta un máximo de 10 años, en los casos más graves.
La nueva Ley de Bienestar Animal también contempla medidas para luchar con el abandono animal en España. Por ejemplo, además de la esterilización obligatoria (las camadas indeseadas son uno de los principales motivos de abandono), se quiere apostar por una mejora del registro de los animales de compañía, instaurando un Sistema Estatal de Registros de Protección Animal en el que se contemple un listado completo de animales, criadores, núcleos zoológicos, entidades de protección, profesionales del comportamiento animal y, por último y muy importante, de personas inhabilitadas para la tenencia.
¿DNI para mascotas? ¿Cursos de capacitación?
La propuesta de un DNI obligatorio para mascotas aún no ha sido aprobada, pero su finalidad es tener una herramienta de control real sobre la población y la situación de los animales en territorio español. Mientras tanto, se espera que todas las comunidades se sumen a un procedimiento unificado para el registro de animales en formato digital, lo que facilitará la puesta en marcha del DNI para las mascotas.
La realización de un curso que asegure la capacitación de los propietarios ha sido un punto muy llamativo también. Este curso, gratuito y online, será obligatorio, al igual que la suscripción de un seguro de responsabilidad civil. El contenido aún no se ha determinado, pero sería interesante que contemplara, más allá de cuestiones muy generales, capacitar al futuro dueño con consejos sobre los primeros días del cachorro en casa, para ayudar en su adaptación, o sobre cómo adaptar a un perro adoptado, ya que muchos de ellos tienen traumas emocionales que deben ser tratados por el bienestar del animal.
¿Cuándo entrará en vigor la Ley de Bienestar Animal?
La nueva Ley de Bienestar Animal abrió el plazo de información pública el 6 de octubre de 2021. Tras sufrir modificaciones en el Consejo de Ministros del 18 de febrero de 2022, debe volver al Congreso de los Diputados y al Senado, donde podría sufrir nuevos cambios. Aun así, se espera que la ley esté prevista para el verano de 2022 y que entre en vigor a partir del 2023.